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Reforma tributaria, Paz Total y Ministerio de la Igualdad pasaron la prueba de gobernabilidad de los primeros meses legislativos del Gobierno del presidente del Pacto Histórico

El gobierno del Pacto Histórico apostó por un paquete de reformas que salieron victoriosas del primer periodo legislativo bajo su administración. Inauguró el Congreso con una reforma tributaria aprobada, las bases para emprender la política de paz total y el Ministerio de la Igualdad.

El 13 de diciembre el presidente Gustavo Petro sancionó la reforma tributaria que, según dijo, permitirán “avanzar en la financiación de los logros de la paz, la reforma agraria, la lucha contra la desigualdad social y el cumplimiento de los compromisos fiscales del país”.

El propio ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, reconoció que no fue una tarea fácil, pero el articulado aprobado le permitió augurar al gobierno más de 20 billones de pesos de recaudo. Aunque el presidente reconoció su derrota, en la negociación con la oposición, del impuesto a las pensiones altas.

Esa fue la primera reformar que se propuso el presidente, con la que se jugó la primera prueba de las mayorías en el Congreso, y le dieron resultado para un nuevo enfoque del recaudo que permitirá en sus estimativos, 19,7 billones en 2023 y 20 billones de recaudo a partir de 2024.

El Gobierno del Pacto Histórico sumó a las reformas pasadas por el Congreso en los primeros meses que le correspondieron a su legislatura, otros proyectos de ley como el Ministerio de la Igualdad, que había sido una promesa de campaña para ser asumido por la vicepresidenta Francia Márquez.

Las mayorías le permitieron al Gobierno nacional pasar en un mes el proyecto para la creación del Ministerio de la Igualdad, del que ambas cámaras aprobaron en la última semana el texto de conciliación entre el Senado y la Cámara de Representantes para pasar a la sanción presidencial.

El presidente del Senado, Roy Barreras, incluyó en la agenda de la última sesión las conciliaciones de la Reforma Política, Jurisdicción Agraria y de la nueva cartera de la cual, esta última, solo resta el evento protocolario del gobierno de su sanción para darle cumplimiento a una de sus promesas.

“Hoy tenemos un ministerio de la igualdad que va a tener la posibilidad de luchar contra la pobreza y la exclusión, y por todas las causas que generen el resurgimiento de la dignidad en Colombia, igualitaria y respetuosa de los derechos constitucionales de los colombianos y las colombianas”, dijo el ministro Alfonso Prada tras la aprobación de la conciliación.

Otro de los logros que se le suman al Gobierno nacional en el primer periodo legislativo para sus propósito es la prórroga de la ley de orden público, 418 de 1997. Una modificación clave para uno de los objetivos centrales del presidente Petro, para lograr la paz en el país.

Esa ley que pasó fuertes polémicas durante su trámite, le otorgó al mandatario las herramientas para emprender los diálogos con los grupos armados, emprender mesas de facilitación desde las cárceles y nombrar gestores de paz y convivencia a partir de personas privadas de la libertad.

Con estas facultades, el Gobierno eligió a los primeros siete gestores de paz que, según el ministro de Justicia Néstor Osuna, contribuirán a la resolución de conflictos dentro de la política de paz total. La mayoría de ellos privados de la libertad en centros carcelarios y solo dos con medidas domiciliarias, pero por capturas relacionadas con las manifestaciones del 2021.

El obstáculo del Gobierno se encuentra en la Reforma Política. El documento que pretende el “cambio” en los partidos de cara las próximas elecciones no logró su cometido y terminó el primer periodo legislativo con críticas profundas por parte de congresistas de la bancada oficialista.

Esta, al ser una reforma constitucional, requiere de ocho debates. Terminó sus primeros cuatro, pero durante la última semana se apartaron varios congresistas, entre ellos miembros del partido Alianza Verde, por considerar que había un deterioro de la participación de las minorías en la aprobación de las listas cerradas por los próximos dos periodos.

Aunque el proyecto pasó su cuarto debate, se espera que la próxima ronda en el Congreso tenga una fuerte polémica por partidos que incluso se declararon de Gobierno, por algunos artículos que no terminan de ganar el apoyo mayoritario.

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