Mauricio Macri anuncia que no será candidato a presidente de Argentina
ArgentinaEl expresidente llama en un video a “agrandar el espacio político del cambio” en las elecciones generales de octubre próximo
Mauricio Macri no será candidato a presidente de Argentina en las elecciones de octubre próximo. En un video de seis minutos que publicó en sus redes sociales, el expresidente dijo que los precandidatos de la alianza opositora que lidera, Juntos por el Cambio, sabrán “agrandar el espacio político del cambio” que, a su entender, inició él mismo hace ocho años desde la Casa Rosada como una cruzada contra el kirchnerismo. “Sé que millones de personas tienen el deseo de que volvamos a trabajar juntos en la dirección que comenzamos allá por 2015, una dirección que tristemente se interrumpió en 2019″, señaló. La crisis económica, saldada con un crédito de 44.000 millones de dólares que pidió al Fondo Monetario Internacional (FMI) en 2018, le amargó la reelección. Macri esperaba este año una revancha en las urnas, pero tras largos meses de reflexiones decidió finalmente no participar de la competencia.
La decisión de Macri responde a múltiples cuestiones, algunas objetivas y otras vinculadas al juego político. En primer lugar, los sondeos le atribuyen una imagen negativa cercana al 50%, solo superada, por poco, por la vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner. En segundo lugar, encontró dentro de su coalición a figuras de peso, como el jefe de Gobierno de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, que le advirtieron que si quería ser el representante de todo el espacio debía someterse a elecciones primarias en agosto. Y en tercer lugar, el renunciamiento le permite mostrarse como el político “sin ego” que él mismo defiende como modelo a seguir.
“Hace casi 80 años una parte importante de la sociedad argentina eligió creer en líderes mesiánicos, personajes que supuestamente nos salvarían y nos llevarían a una vida mejor”, dijo en su mensaje, en referencia al peronismo de los años cuarenta y su versión moderna, el kirchnerismo. “Este liderazgo paternalista desalentó a los argentinos a asumir su propia responsabilidad: esa subordinación nos trajo hasta acá a un país con más de la mitad de los argentinos pobres, con la economía arrasada, acechados cada vez más por el narcotráfico”, dijo. Disparó luego contra el actual presidente, Alberto Fernández, al que consideró “una marioneta” de Cristina Kirchner.
Sin Macri en la contienda, los candidatos de la coalición opositora son Rodríguez Larreta, la exministra de Seguridad Patricia Bullrich y la exgobernadora de Buenos Aires María Eugenia Vidal. Por la Unión Cívica Radical (UCR), integrante de la coalición, se ha anotado el gobernador de Jujuy (norte), Gerardo Morales. Todos ellos destacaron la “decisión histórica” del expresidente y la consideraron un acto de “generosidad” que allana el camino a nuevos liderazgos. “Aún pudiendo volver a ser presidente, ha priorizado los intereses de nuestro país antes que los propios, como muy pocos dirigentes lo han hecho en la historia argentina”, escribió Bullrich. Para Rodríguez Larreta, el gesto de Macri “deja en claro su enorme visión, su generosidad, valentía y amor por los argentinos”. El gobernador Morales dijo que el expresidente tuvo “una buena decisión que ayuda al colectivo de Juntos por el Cambio”.
Fuera de los lugares comunes, todos respiraron aliviados. La indefinición de Macri sobre su candidatura ya generaba más problemas que beneficios a un sector que se presenta ante la sociedad como la alternativa ordenada al descalabro político y económico de la gestión peronista. La pelea será ahora por conseguir el apoyo del expresidente, que se ha cuidado muy bien de disimular cuál de todos los contendientes es su favorito. Macri se ha sacado fotos con todos, aunque no es un secreto que si pudiese elegir a dedo, señalaría a Patricia Bullrich, su exministra de Seguridad. Bullrich representa al sector más a la derecha de la coalición y quien puede, en caso de llegar a la contienda definitiva en octubre, atraer el voto del ultraliberal Javier Milei, un tercero en discordia que con llamadas a terminar con “la casta” política sube como la espuma en los sondeos.
Si no hay un terremoto político, las próximas elecciones en Argentina no tendrán a un expresidente como candidato. Cristina Kirchner se autoexcluyó de la pelea en diciembre pasado, cuando se declaró “proscrita por la justicia” tras la condena a seis años de cárcel e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos que le aplicó un tribunal por corrupción. La renuncia de Macri ha dado alas a los seguidores de la expresidenta, que piden al presidente, Alberto Fernández, que siga los mismo pasos y defina si será o no candidato en octubre. Fernández dijo en febrero pasado que desistiría de la reelección si el partido le acerca un aspirante más competitivo que él. El kirchnerismo le recuerda que su imagen negativa ronda el 70%.
EL PAÍS