Le dispararon a la caravana de escoltas de la vicepresidenta Francia Márquez
Colombia
Dos de los vehículos blindados adscritos al esquema de seguridad de la vicepresidenta de Colombia, Francia Márquez, fueron impactados por disparos de fusil cuando se movilizaban por una vía que conduce del departamento de Cauca al Valle del Cauca.
El hecho sucedió a las 1:30 p.m. de este miércoles, en inmediaciones del corregimiento Timba, en el municipio caucano de Buenos Aires.
Por fortuna, la vicepresidente no viajaba en la caravana en ese momento.
“He sido informada por parte de mi equipo de seguridad y protección que el vehículo principal de la caravana vicepresidencial, en el que me movilizo normalmente, fue impactado por un proyectil, al parecer de fusil, el cual penetró al interior del vehículo sin causar ninguna lesión a los ocupantes”, señaló Márquez en un comunicado.
Y añadió: “Los hechos ocurrieron momentos después de salir del Municipio de Suárez, Cauca, donde me encontraba junto a la Ministra de Educación, Aurora Vergara, visitando la que será la nueva sede de la Universidad del Valle para el Norte del Cauca, y cuando ya estaba en la ciudad de Cali, atendiendo otro compromiso de mi agenda como Vicepresidenta y Ministra”.
De acuerdo con la Unidad Nacional de Protección (UNP), entidad encargada del anillo de seguridad de Márquez, los escoltas no resultaron heridos en el ataque.
Después del evento en Suárez, la vicepresidenta abordó un helicóptero rumbo a Cali, mientras que los hombres de su esquema de protección hicieron el recorrido por tierra.
En la zona en la cual se presentó el atentado delinque el Estado Mayor Central (EMC), una disidencia de las antiguas Farc. La fuerza que tiene desplegada allí se conoce como frente Jaime Martínez.
El pasado 16 de junio hubo un incidente similar en la zona rural de Jamundí (Valle), cuando presuntos disidentes del EMC le dispararon a la camioneta que transportaba a Sigifredo Márquez Trujillo, el papá de la vicepresidenta Francia Márquez.
Tampoco hubo heridos, ni personas capturadas, a pesar de una recompensa de hasta $100 millones de pesos.
EL COLOMBIANO
