Comienza transición de gobierno de Bolsonaro al de Lula en Brasil
Brasil«El trabajo de nuestro equipo estará guiado por los principios de interés público, colaboración, transparencia, planificación, agilidad y continuidad de los servicios», escribió Alckmin en la red social Twitter en la que también agradeció la confianza de Lula.
Medios periodísticos aseguran que la primera manifestación del mandatario de tendencia ultraderechista Jair Bolsonaro, después de perder la elección del domingo, redujo incertidumbres sobre la transición.
La seña fue hecha por el ministro jefe de la Casa Civil, Ciro Nogueira, después del breve pronunciamiento del exmilitar presidente el pasado martes.
Según Nogueira, el jefe de Estado en funciones autorizó el comienzo del proceso, punto que viene siendo acompañado de cerca por el mercado.
El dispositivo coordinado por Alckmin podrá contar con hasta 50 integrantes, nombrados en comisión por la Casa Civil.
Tal grupo debe conocer sobre el funcionamiento de los órganos y entidades de la administración pública, pudiendo solicitar datos sobre cuentas públicas, programas y proyectos del Gobierno federal.
Además debe dirigir los primeros actos del presidente electo y podrá ejercer funciones hasta 10 días después de la toma de posesión, programada para el 1 de enero de 2023.
El proceso está instituido en Brasil desde el cambio de Fernando Henrique Cardoso para el primer mandato de Lula en 2003.
Cuando el traspaso entre Bolsonaro y Michel Temer, en 2018, 27 nombres fueron señalados para el equipo de transición, en la época liderada por el entonces diputado federal y ahora candidato derrotado al gobierno de Rio Grande do Sul, Onyx Lorenzoni.
Este año, una comisión del Tribunal de Cuentas de la Unión también debe seguir el proceso. Una junta para el cargo fue anunciada el 31 de octubre y será coordinada por el titular en ejercicio de esa corte, Bruno Dantas.
En la primera ronda de sufragio del 2 de octubre, el aspirante al poder por el Partido de los Trabajadores ganó con 48,43 por ciento de los votos válidos, mientras que Bolsonaro, quien codiciaba reelegirse por el Partido Liberal, tuvo 43,20 por ciento.
Como ninguno de los políticos logró en ese pleito la mayoría absoluta de votos, es decir, más de la mitad de válidos (excluidos blancos y nulos), como establece la legislación para ser electo, disputaron el balotaje.
De manera muy cerrada, el extornero mecánico volvió a triunfar en el segundo turno del 30 de octubre con un 50,90 por ciento frente al 49,10 del exparacaidista.
PRENSA LATINA