Cinco gráficos sobre la inclusión financiera de las mujeres
MujeresMás del 40 % de las mujeres en todo el mundo –es decir, 1000 millones– no tiene acceso a servicios financieros formales, según Global Findex.
La brecha financiera por razón de género se mantiene en un 9 % en los países en desarrollo, aunque en algunas partes del mundo es mucho más alta, de acuerdo a datos del informe Global Findex de 2014.
Las mujeres tienen un 20 % menos de probabilidades que los hombres de tener una cuenta bancaria y un 17 % menos probabilidades de haber recibido un préstamo de una institución financiera formal.
¿Cuán incluidas están las mujeres en el sistema financiero en el mundo?
Centrar la atención en el acceso universal a servicios financieros para 2020 en 25 países
Para lograr la inclusión financiera y en el marco de la iniciativa Acceso Universal a los Servicios Financieros para 2020, el Grupo Banco Mundial y una coalición de asociados se centran en 25 países, donde vive el 73 % de la población que está excluida del sistema financiero.
La meta de la iniciativa UFA2020 es permitir el acceso para todos los adultos, mujeres y hombres por igual, a una cuenta de transacciones mediante la cual puedan acceder a otros servicios financieros –como ahorro, crédito o seguros–, que puedan ayudarles a mejorar sus condiciones de vida.
Porcentaje de mujeres que tienen una cuenta en los 25 países de la iniciativa UFA2020
Las mujeres obtienen préstamos principalmente de familiares y amigos
Las mujeres usan los préstamos para educación, servicios de salud, e inversiones en sus predios agrícolas o negocios.
La meta de la iniciativa Acceso Universal a los Servicios Financieros para 2020, impulsada por el Banco Mundial, es que cada persona tenga una cuenta, y no cada hogar, lo cual reviste especial importancia para la participación económica y representa un beneficio para las mujeres, según Douglas Pearce, (i) experto en el tema de inclusión financiera del Grupo Banco Mundial. Cuando las mujeres participan en el sistema financiero, el crecimiento económico es más alto, las desigualdades disminuyen, y el bienestar tanto físico como social es mayor.
El hecho de poder ahorrar dinero, recibir remesas de manera segura, o tener acceso a créditos para iniciar o ampliar un negocio puede mejorar las condiciones de vida de las mujeres y sus familias, ya que ellas invierten más en salud, en educación y en otras áreas que benefician a sus hijos.
Banco Mundial