Chile recuerda el plebiscito de 2020 mientras debate si celebrar uno nuevo
ChileEl histórico plebiscito de octubre de 2020 en el que los chilenos decidieron masivamente derogar la Constitución actual, heredera de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), cumple este martes dos años mientras las fuerzas políticas debaten si celebrar una nueva votación el año que viene.
Aquel 25 de octubre de 2020, en plena segunda ola de la pandemia, un 78,28 % de los chilenos votó por el cambio constitucional, frente al 21,72 % que prefirió quedarse con la Carta Magna vigente, que fue reformada decena de veces en democracia pero sigue siendo foco de críticas por su corte neoliberal.
En aquella votación, además, el 78,9 % de los electores escogió que el órgano encargado de redactar el nuevo texto fuera un convención independiente, integrada por 155 miembros elegidos en las urnas solo para ese fin.
El proceso, que se concibió como la salida a las graves revueltas de 2019 contra la desigualdad y el modelo de sociedad, debía cerrarse el pasado 4 de septiembre, con otro plebiscito para aprobar o rechazar la propuesta constitucional.
Sin embargo, y pese a que casi el 62 % rechazó la propuesta de nueva Constitución, el proceso constituyente sigue abierto y las fuerzas políticas debaten desde entonces cómo encaminarlo.
La gran mayoría de la ciudadanía está de acuerdo con sustituir la Ley Fundamental actual, pero no les gustó ni el texto que se propuso ni las formas de la convención, según todas las encuestas.
«Ha hablado el pueblo de Chile y lo ha hecho de forma fuerte, clara. Los chilenos y chilenas han exigido una nueva oportunidad para encontrarnos y debemos estar a la altura en este llamado», afirmó el presidente Gabriel Boric la noche de la votación.
¿NUEVO PLEBISCITO?
La gran duda hoy es si Chile volverá a las urnas para determinar en un nuevo plebiscito «de entrada» si sigue queriendo el cambio constitucional que ratificó hace dos años o aquel resultado se da como válido y se procede directamente con la elección de los convencionales.
Los partidos que integran la coalición oficialista de izquierda apoyan esta segunda opción, mientras que parte de la derecha se inclina por un nevo referéndum.
Los diálogos parlamentarios para convocar un nuevo proceso constituyente arrancaron con fuerza pocos días después del plebiscito, pero en las últimas semanas las negociaciones se han estancado y hay pocos avances.
El presidente del Senado, el socialista Álvaro Elizalde, aseguró este martes que «el país requiere conocer cuál va a ser es el itinerario institucional para arribar a una Constitución nacida en democracia, cuál es el mecanismo que se va a llevar adelante y cómo se garantiza un principio básico como el rol protagónico de la ciudadanía en la elaboración del nuevo texto».
«Tenemos que llegar a un entendimiento lo antes posible (…) Seguir postergando el debate sólo genera más incertidumbre. El diálogo debe dar resultado y, por tanto, llegamos a un momento en que se requieren definiciones para tener un buen acuerdo para Chile», agregó Elizalde, encargado de dirigir las negociaciones.
EFE