Bolivia condecora a la que fue su primera indígena aimara parlamentaria
NoticiasLa Cámara de Diputados de Bolivia condecoró hoy a Remedios Loza, que fue a finales de la década de 1980 la primera mujer indígena aimara en ocupar un puesto de representación parlamentaria y que destacó por su lucha por la igualdad en el país.
La mujer de 69 años recibió la Orden Parlamentaria al Mérito Democrático Marcelo Quiroga Santa Cruz, la máxima condecoración de la cámara baja, en reconocimiento a su «vocación de servicio» y por ser un «icono» de la revalorización de la llamada chola o mujer de pollera, una falda típica, mencionó la resolución legislativa.
Loza ingresó al pleno del hemiciclo en medio de aplausos con la vestimenta que la caracterizó por décadas, con un sombrero tipo hongo, una manta con flecos y una pollera negra, vestimenta característica de la chola paceña.
La distinción fue una petición hecha por el presidente boliviano, Evo Morales, que contó con el apoyo de los legisladores «por unanimidad», afirmó en el acto la presidenta de la Cámara de Diputados, Gabriela Montaño.
«No he venido de adorno, he venido a luchar por la clase que represento y lo he hecho. Mal o bien, lo he hecho», enfatizó Loza ante la asamblea de diputados y un grupo de allegados, que derramaron algunas lágrimas ante la emotividad de sus palabras.
La «comadre Remedios», como se la conoce, recordó algunos episodios de discriminación que sufrió por su condición de chola y también cómo trabajó para romper esas «cadenas».
«Las cholas sirvientas, barrenderas, violadas y prostituidas por los hijos de los caballeros, eso no podías ser, eso no podía pasar», rememoró Loza, al considerar que esa situación le sirvió para sostener su causa.
En 1989 se convirtió en la primera chola o mujer de pollera en el Legislativo del país, al desempeñar la función de diputada por el departamento de La Paz, por el desaparecido partido Conciencia de Patria (Condepa) liderado entonces por Carlos Palenque, a quien se llamaba «El compadre».
Antes, se destacó en programas radio y televisión, en medios encabezados por Palenque, marcando así también un hito en la comunicación boliviana al ser una de las primeras mujeres de pollera en ese ámbito.
Tras la muerte de Palenque en 1997, Loza se presentó a las elecciones generales de ese año como candidata a la presidencia alcanzando un tercer lugar de la preferencia electoral, algo que supuso un hecho sin precedentes para una mujer de pollera.
«¿Por qué no hay (ahora) una mujer de pollera candidateando? Todavía hay casillas donde estamos metidas», reflexionó la mujer que actualmente está alejada de la política.
Al recordar su paso por el Parlamento se dirigió a los actuales parlamentarios, a los que pidió tengan «amor a la patria, no al poder ni al dinero», y les recordó que están para luchar por los derechos conquistados.
EFE