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La Asamblea (Parlamento) de Panamá estudia un polémico anteproyecto de ley que podría otorgar la amnistía o el indulto al expresidente Ricardo Martinelli, asilado en la embajada de Nicaragua tras una condena por corrupción, y que fue rechazado este viernes por Transparencia Internacional (TI) al considerar que está hecho para dar «impunidad».

El capítulo panameño de Transparencia Internacional rechazó este viernes en un comunicado el anteproyecto de ley porque «es de todos conocido que el objetivo (…) es impedir que cumplan su condena una serie de exfuncionarios investigados y procesados por delitos contra la Administración Pública, en especial el expresidente Ricardo Martinelli».

«En este último caso, se trata de una de las pocas condenas por blanqueo de capitales lograda por el Sistema de Administración de Justicia en un esquema de gran corrupción, con afectación millonaria al erario», señala el comunicado del organismo anticorrupción, que además alerta de que esa posible ley afectaría a los esfuerzos de Panamá de salir de las listas de paraísos fiscales en las que está incluida desde hace años.

Según TI, «el citado proyecto introduce reformas al Código Penal que permitirían aplicar las importantes figuras del indulto o la amnistía a delitos comunes, más allá de los delitos políticos que contempla la Constitución, e introduciendo una serie de definiciones que van a contramano de la doctrina nacional e internacional sobre la materia».

El diputado Luis Eduardo Camacho, vocero y amigo del expresidente Martinelli, presentó el pasado lunes ante el pleno del Legislativo el anteproyecto de ley «que dicta disposiciones sobre amnistía, el indulto, la rebaja de pena, la concesión de libertad condicional, que modifica el Código Penal y el Código Procesal Penal», según información oficial del Parlamento.

Expertos y miembros de la sociedad civil han alertado que el principal beneficiado de esa propuesta sería el expresidente panameño, quien está asilado desde el pasado marzo en la embajada de Nicaragua en Panamá después de que la Justicia panameña lo condenara, en medio de su candidatura presidencial, a más de 10 años de prisión por blanqueo de capitales.

«Soy amigo de Ricardo Martinelli y nunca lo voy a negar. Pero no vengo solo a defenderlo, yo vengo a defender el Estado de Derecho (…) Quiero recordar precisamente el caso de Martinelli por eso este (ante) proyecto de ley habla también de la necesidad de respetar los procesamientos vinculantes de organismos internacionales hacen al respecto de un caso», señaló el lunes Camacho, diputado del partido Realizando Metas (RM), fundado por Martinelli.

Ahora, la Comisión de Gobierno, que el mismo Camacho preside, deberá decidir si «prohíja» o no ese anteproyecto. Si pasa esta primera fase, luego deberá ser discutido en tres debates por los diputados del hemiciclo.

La presentación en el hemiciclo de ese anteproyecto de ley ha generado polémica en Panamá, donde diputados han expresado su rechazo y consideran que tienen tintes de «inconstitucionalidad» e incluso el presidente del país, José Raúl Mulino, que partía como candidato a la vicepresidencia en la fórmula de Martinelli hasta que fue inhabilitado, se ha pronunciado al respecto señalando que «no tiene su aceptación».

«Esa ley no tiene ni mi aprobación, ni mi consenso, ni he participado (en ella) ni he hablado de nada del tema con ningún diputado», dijo Mulino el jueves durante su rueda de prensa semanal.

«Esa ley de amnistía no la conozco. Ayer (el miércoles) llegó a mis manos, por primera vez, el borrador. La estudiaré. Eso no tiene mi consenso ni mi aceptación ni nada que se parezca», insistió el mandatario.

Y espetó: «La estudiaré como corresponde como abogado que soy reiterando algo que es bien importante, actuaré en función de la ley y con todos los recursos que la ley me permite como presidente, para valorarla en el tiempo según la asamblea de diputados vaya avanzando en la misma».

Desde su entrada al poder el pasado 1 de julio, Mulino nombra cada vez con menos frecuencia a Martinelli, destacando que «no hay avance» en su situación, e incluso ambos han protagonizado alguna fricción pública en redes sociales como la de anoche, en la que el presidente respondió a una crítica del exmandatario sobre lo «iluso» de pensar que son efectivas unas multas millonarias a las eléctricas: «En fin vamos mal y de mal en peor».

«Esas multas responden a un incumplimiento y las autoricé yo. Si vamos de mal en peor es cuestión de criterios. Estoy trabajando honestamente por cumplir con todo el país. Lo lamento por ti!», respondió en X Mulino.

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