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Reyna Celeste Ascencio, diputada federal por parte del partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), propuso que las Organizaciones No Gubernamentales (ONGs) no reciban donaciones por parte de países extranjeros en caso de que “promuevan el golpismo”.

Pese a que la propuesta por la morenista no fue leída en la tribuna, esta se publicó en la Gaceta Parlamentaria del martes 22 de febrero en donde se establece la reforma al artículo 82 de la Ley del Impuesto sobre la Renta, justificando que las ONGs deben regular y transparentar los recursos que reciben del extranjero, especialmente, si se dedican a desarrollar actividades de cabildeo y litigio en contra de México.

De acuerdo con la propuesta, el proyecto de nación del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) autodenominado como la Cuarta Transformación (4T) ha sido blanco de ataques por parte de organizaciones las cuales “se escudan en la protección de grupos vulnerables, el medio ambiente o la defensa de los derechos humanos”.

“Tal como lo ha señalado el presidente Andrés Manuel López Obrador, estas organizaciones promueven el golpismo y se trata de evidentes actos de intervencionismo que violan nuestra Soberanía Nacional, es totalmente inmoral que gobiernos y empresas extranjeras quieran tener injerencia en la vida nacional”, se lee en el documento.

Asimismo, indica que cuando las ONGs son financiadas, de forma directa o indirecta, por parte de de gobiernos o corporaciones extranjeras privadas “se les revocará la autorización para recibir donativos deducibles fiscalmente”.

“A través de este control se evita que las actividades de estas organizaciones se dirijan a influir indebidamente en las leyes mexicanas o que puedan estar judicializando decisiones en contra del gobierno, lo que constituye un claro acto de intervencionismo y neoliberalismo encubierto”, establece el texto.

Finalmente, la morenista comentó que esta propuesta también busca acabar con el negocio de intereses extranjeros y empresariales en los cuales estos contactan a las ONGs para que simulen una defensa hacia los derechos humanos, “cuando en realidad promueven una agenda antinacional y contraria al cambio verdadero”.

Cabe mencionar que durante los últimas semanas, López Obrador se ha lanzado en contra de una de las organizaciones que lanzó una investigación periodística en donde se reveló que su hijo mayor, José Ramón López Beltrán, habitó una residencia perteneciente a un ex ejecutivo de Baker Hughes, empresa que mantiene contratos millonarios con Petróleos Mexicanos (Pemex).

El Jefe del Ejecutivo tachó a Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI) como “traidores a la patria”.

“A ellos les pregunto: ¿Qué no es corrupción recibir dinero del gobierno de Estados Unidos para hacer labor de zapa en contra del proyecto de transformación? Es hasta traición a la patria, pero por qué no dicen cuánto reciben (…) Es interesante esto que está sucediendo y el que nada debe nada teme (…) La campaña contra nosotros viene de arriba”, declaró López Obrador en su conferencia matutina del pasado 15 de febrero.

Ante las declaraciones del tabasqueño MCCI le respondió al presidente en donde afirmaron que sí recibe dinero para financiar su labor de investigación contra la corrupción de fuentes nacionales y extranjeras, mismas que se realizan siempre en el marco de la ley.

Aunado a ello, desde la mañanera del 21 de febrero, el tabasqueño arremetió contra el gobierno de Estados Unidos pues, de acuerdo a sus declaraciones, “es una vergüenza para cualquier gobierno en el mundo meterse a la vida interna de otro país, meterse a la vida política, pública de otro país y además entregando dinero”.

Infobae