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Miles de militantes del gobernante Movimiento al Socialismo (MAS) celebraron el 26 de marzo su 28 aniversario con evidentes discrepancias entre los bloques «arcista», que apoya al presidente boliviano, Luis Arce, y el «evista» del exmadatario y jefe de ese partido, Evo Morales.

El multitudinario evento se realizó en la población de Ivirgarzama, situada en la zona tropical productora de hojas de coca en Cochabamba, que es parte del principal bastión político del MAS y donde Morales también es el máximo dirigente cocalero, en el estadio que lleva su nombre.

El primero en llegar fue Morales, después de una lluvia intensa que retrasó por varios minutos el inicio del acto, y luego hicieron su arribo Arce y el vicepresidente, David Choquehuanca, rodeados por un grupo de seguidores.

El MAS celebró su aniversario con cantos y bailes y con un «Poema Antiimperialista», que leyó la niña Jimena Cartagena.

«Somos anticapitalistas, somos antiimperialistas, nunca nos rendimos y jamás nos rendiremos. Revolución democrática y cultural para salvar a la humanidad de la crisis social, paz con justicia social. América plurinacional», fue el fragmento del poema que leyó la menor entre los aplausos de los asistentes.

«ARCISTAS» Y «EVISTAS»

Las diferencias entre los dos bloques se evidenciaron en cuanto los dos líderes estuvieron en el evento, pues cada uno coreaba el nombre de Morales o de Arce.

«Lucho no está solo», coreó un grupo de funcionarios estatales cerca a la tarima principal, mientras que otro decía «Evo de nuevo» o «que vuelva Evo», como una forma de impulsar al presidente del MAS a que presente su candidatura en 2025.

Los discursos de Arce y Morales estuvieron antecedidos por los de otros representantes de organizaciones sociales, en los que enaltecieron el valor de cada uno, mientras otros con cierto disimulo buscaron generar empatía hacia ambos.

En su discurso, el presidente Arce insistió en la necesidad de confrontar ideas y de mantener la «unidad ideológica» en el MAS, mientras que Morales arremetió con críticas y recomendaciones hacia la gestión del jefe de Estado.

Morales cuestionó el manejo económico y criticó a los «técnicos» y «ministros» que, a su juicio, entorpecen la gestión del presidente y, además, reclamó a Arce de que muchos funcionarios usaban las redes sociales para insultarle, a lo que este último negó con la cabeza.

Muchos «arcistas» exaltaron el discurso del mandatario y hasta su alocución estuvo antecedida por pirotecnia, pero tuvieron un perfil bajo y hasta se retiraron cuando al final de su intervención Morales cuestionó al Gobierno.

POSTURAS ANTE LA DIVISIÓN

En declaraciones a EFE, el militante «evista» Nelson Cox aseguró que el aniversario del MAS es «absolutamente reflexivo» y que es necesario que se pueda generar una «unidad en la lealtad, una unidad con hechos y no solamente con palabras».

También dijo que es necesario que el Gobierno de Arce «cogobierne» y «respete» la estructura del MAS, que preside Morales.

Por su lado, la dirigenta Celima Torrico, una de las fundadoras del MAS, manifestó a EFE que el MAS «está unido», aunque últimamente han habido «discrepancias» como sucede en todas las «familias».

Torrico destacó la fortaleza que ha tenido el MAS en tiempos de Morales, aunque también valoró que con Arce Bolivia está «recuperando» su «soberanía económica.

Las tensiones en el MAS se dan desde hace más de un año con críticas de Morales y los «evistas» a la gestión de Arce, denuncias de supuesta corrupción e insinuaciones de traición que también han llegado hasta Choquehuanca.

Por su parte, varios de los «arcistas» o «renovadores» han cuestionado el liderazgo de Morales y han pedido que en un congreso del MAS se determine apartar al líder histórico para dar paso a una generación de nuevos dirigentes.

Gabriel Romano

EFE