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Por primera vez, los mexicanos votarán por miles de candidatos para ocupar 2600 cargos en tribunales locales, estatales y federales.

Los votantes mexicanos se enfrentan a una tarea titánica este domingo.

Por primera vez en la historia del país, elegirán a más de 2600 jueces y magistrados, incluidos los que formarán parte de la Suprema Corte y de cientos de otros tribunales federales, estatales y locales.

Los comicios harán que el poder judicial pase de ser un sistema de nombramientos a uno en que los votantes elegirán a sus jueces. Quienes apoyan el cambio argumentan que hace que el sistema sea más democrático y ataca problemas como el nepotismo y la corrupción. Quienes lo critican dicen que el riesgo es dar más poder al partido gobernante y abrir los tribunales a candidatos sin experiencia o cualificaciones suficientes o susceptibles de ser influenciados por grupos delictivos, como los cárteles.

El experimento es tan ambicioso, divisivo y confuso que es difícil saber cómo va a desarrollarse: un solo día de votaciones promulgará el cambio judicial más amplio que se haya llevado a cabo en una gran democracia.

Esto es lo que hay que saber sobre las elecciones de jueces en México, cómo funcionan y por qué son importantes.

¿Por qué los mexicanos van a votar por sus jueces?

Las elecciones son la culminación de un proceso polémico en el que Morena, el partido gobernante, y sus aliados enmendaron la Constitución el año pasado a fin de modificar ampliamente el sistema de tribunales.

La idea de elegir a los jueces por votación popular fue propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador e impulsada por su sucesora, Claudia Sheinbaum.

López Obrador impulsó el plan después de que la Corte Suprema emitiera una serie de sentencias que bloquearon algunos de los planes de su gobierno —como debilitar el organismo de observación electoral de México y poner a la Guardia Nacional bajo control militar— y de que jueces federales emitieran órdenes de suspender algunos de sus proyectos emblemáticos, alegando problemas medioambientales.

Molesto por esas sentencias, que calificó de motivadas políticamente, López Obrador instó a sus bases a ayudar a consolidar el control de Morena en el Congreso. Las enormes mayorías obtenidas por el partido en las elecciones generales del año pasado han permitido a sus legisladores aprobar una serie de cambios constitucionales que van a rediseñar el sistema judicial.

¿Cómo funcionarán las elecciones del poder judicial?

El domingo, los votantes elegirán a la mitad del poder judicial de México, y al resto en 2027.

Este año estarán en juego casi 880 cargos de jueces federales, desde jueces de distrito hasta magistrados de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Además, 19 de los 32 estados del país elegirán jueces y magistrados locales para cubrir unos 1800 puestos.

Más de 7700 candidatos postulan a esos puestos. A diferencia de las elecciones ordinarias, en las que los partidos políticos pueden financiar las campañas de sus candidatos, los aspirantes a jueces no pueden contar con financiación pública ni privada, lo que los obliga a utilizar sus propios recursos y un marketing de guerrilla en las redes sociales para atraer la atención.

Para intentar orientar a los votantes, el organismo que supervisa la votación creó una plataforma en línea para que la gente pueda familiarizarse con los candidatos. Aun así, incluso algunos partidarios de la medida reconocen que será difícil para los votantes elegir con conocimiento de causa entre miles de candidatos en gran medida desconocidos.

En una encuesta reciente que Sheinbaum mencionó durante su conferencia de prensa diaria para tratar de mostrar su apoyo al experimento, el 72 por ciento de unos 1000 votantes encuestados dijo que la elección judicial era necesaria. Pero solo una pequeña parte de ellos, el 23 por ciento, sabía quiénes eran los candidatos.

“Van a ir a votar a ciegas”, dijo en una entrevista en la radio esta semana Heidi Osuna, directora de la agencia que supervisó el sondeo. Muchos votantes sin información, dijo, muy posiblemente “no asistan a votar”.

¿Las elecciones van a mejorar el sistema judicial?

Este ha sido durante meses un asunto de debate.

Quienes respaldan las elecciones a menudo hablan de un sistema plagado de corrupción y nepotismo en el que la justicia es más accesible para quienes pueden pagarla y donde decenas de jueces han sido cooptados por uno o más cárteles violentos.

De hecho, los mexicanos perciben a los jueces entre los funcionarios más corruptos del país, solo superados por los policías de tránsito.

Un sistema en el que los jueces sean elegidos, afirman sus defensores, romperá los vínculos que algunos tienen con poderosos delincuentes, funcionarios corruptos y miembros de la élite. En su lugar, argumentan, los jueces responderán ahora a los intereses de quien los votó: el pueblo mexicano.

Si bien los críticos admiten que el poder judicial de México se enfrenta a enormes problemas y necesita un cambio profundo, afirman que este no es el modo de arreglarlo.

Varios expertos han argumentado que la medida politizará tribunales que deberían impartir justicia de forma independiente, y que el partido oficialista, Morena, que ya ostenta la presidencia y el Congreso, ejercerá una influencia extraordinaria sobre la votación. También han dicho que un sistema de elección directa corre el riesgo de permitir que candidatos poco cualificados se conviertan en jueces y abre la puerta a una mayor influencia de los cárteles.

¿Cuándo se sabrán los resultados de las elecciones de jueces en México?
México vota con boletas de papel, y todas deben contarse a mano.

A diferencia de otras elecciones mexicanas, en las que los resultados preliminares se conocen la noche de las elecciones, los resultados para el poder judicial federal, incluido el máximo tribunal, se darán a conocer en los días posteriores a la votación.

El recuento nacional de votos que determinará los resultados definitivos será el 15 de junio.

NYT